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25feb14
Canciller ruso rechaza imposiciones externas a Ucrania
El ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov, calificó hoy de peligrosos y contraproducentes los intentos desde Europa de imponer a Ucrania una opción, y descartó una injerencia de Rusia en los asuntos internos del vecino país.
La imposición a Ucrania de una elección por el principio: "estás con nosotros o contra nosotros", es peligrosa y contraproducente enfatizó Lavrov al término de las conversaciones oficiales aquí con su par de Luxemburgo, Jean Asselborn.
Comentó el titular de Exteriores que su país desearía entender mejor las relaciones de la Unión Europea hacia "nuestros vecinos comunes", en alusión directa también a los planes de la OTAN, en el espacio postsoviético.
Indicó, no obstante, que Rusia comparte el interés de que esa república exsoviética sea parte de la familia común europea y reiteró las preocupaciones de Moscú por los procesos que tienen lugar en esa nación no siempre por la senda constructiva, observó el canciller.
Lavrov ratificó el principio de la diplomacia rusa de la no injerencia en los asuntos internos de Ucrania, pero dijo confiar en que todos los socios internacionales mantendrán una posición similar y apoyarán los contactos con todas las fuerzas políticas ucranianas, destacó la agencia ITAR-TASS.
En su opinión, no es necesario que se intente obtener ventajas coyunturales unilaterales en esta etapa, que requiere de un diálogo nacional y el retorno de Ucrania a una senda legal.
Lavrov, de otro lado, aclaró como significativo para Moscú, que antes de proseguir con la ayuda a Kiev debe tenerse comprensión acerca de la composición del nuevo gobierno y de su programa, incluida la cuestión de la estabilidad económica.
Advirtió el jefe de la diplomacia rusa que pese a los compromisos entre el Gobierno del presidente Víktor Yanukóvich y líderes de la oposición, las actuales autoridades no cumplen con el acuerdo refrendado el 21 de febrero, encaminado entonces a una solución de la crisis política.
Citó a modo de ejemplo que los combatientes radicales no se han retirado del Maidán (la plaza de la Indepedencia), y no abandonaron los edificios ocupados, mientras son esas las fuerzas que responden hoy por el mantenimiento del orden en Kiev, contrastó Lavrov.
Esta semana el primer ministro ruso, Dmitri Medvedev, admitió que algunos socios extranjeros difieren de la opinión de Rusia sobre la actual cúpula del poder en Ucrania, pero consideró una aberración de la conciencia proclamar legítimo el resultado de un motín armado.
Francamente, no tenemos con quién dialogar y la legitimidad de varias instituciones que están funcionando en Ucrania parece dudosa, sentenció Medvedev.
La Cancillería de Rusia, de otro lado, instó a todos los actores políticos implicados en la crisis ucraniana a conducir al país hacia el marco legal y poner freno a las acciones de los extremistas que tomaron el poder por la fuerza.
[Fuente: Prensa Latina, Moscú, 25feb14]
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