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12ene13
La intervención en Malí debe estar bajo mando de la ONU, según enviado del Kremlin
La operación militar en Malí contra los grupos armados que controlan el norte de este país africano debe estar bajo mando de las Naciones Unidas y la Unión Africana, declaró hoy a RIA Novosti el senador ruso Mijaíl Marguélov, comisionado del Kremlin para la cooperación con los países de África.
Las declaraciones del enviado del Kremlin se producen después de que Francia desplegara el viernes cientos de sus soldados en Bamako, capital de Malí, en atención a una solicitud de asistencia militar por parte del presidente interino el país, Dioncounda Traoré. Apoyado por la aviación gala, el Ejército maliense ha logrado en las últimas horas recuperar el control de la ciudad de Kona tomada anteriormente por los islamistas.
"Aún comprendiendo la situación creada en Malí, considero, no obstante, que cualquier operación militar en África puede y debe estar bajo bandera de la ONU y la Unión Africana. Los africanos son los únicos que pueden y deben dar solución a los problemas de su continente", explicó Marguélov.
Recordó que el Consejo de Seguridad de la ONU había programado inicialmente la intervención en Malí para el próximo otoño, pero finalmente tuvo que adelantarla debido a la ofensiva de los extremistas y la situación en el conjunto de la región.
"Los abusos perpetrados por los islamistas en el norte del país convierte a la región en un vivero del terrorismo y el crimen organizado y pone en peligro la soberanía de Malí y la estabilidad de los países vecinos. Esta propagación del foco rebelde bajo tutela de Al Qaeda empeora las consecuencias negativas del conflicto libio que llevó al auge del islamismo en el área comprendida entre el Sahel y el Cuerno de África", advirtió el senador ruso.
Ante la ofensiva rebelde, el Gobierno maliense decretó la víspera el estado de excepción en el conjunto del territorio nacional. El presidente del país llamó además a la movilización general de la población para apoyar al Ejército en su lucha contra los grupos armados.
El pasado jueves, el Consejo de Seguridad de la ONU celebró, a instancia de París, consultas extraordinarias para analizar la situación en Malí. Anteriormente, este organismo internacional autorizó el envío al país de una fuerza militar conjunta africana integrada por 3.300 efectivos.
La situación en Malí se agravó tras el derrocamiento del régimen de Muamar Gadafi en Libia. El éxodo de las tribus tuaregs que gozaban de la protección por parte del exlíder libio, provocó una guerra separatista y el surgimiento en abril pasado del Estado autoproclamado de Azawad, que ocupa dos tercios del territorio nacional.
[Fuente: Ria Novosti, Moscú, 12ene13]
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