EQUIPO NIZKOR |
|
23jun06
Ofensiva de EE.UU. contra Venezuela.
América latina se convirtió en el escenario de una feroz y creciente campaña diplomática de Estados Unidos para evitar el ingreso temporal de Venezuela en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU), desde donde la Casa Blanca teme que el presidente Hugo Chávez haga uso de su escaño para bloquear las políticas norteamericanas contra Irán.
Este nuevo enfrentamiento entre Caracas y Washington alcanzó ayer un pico de máxima tensión, luego de que se hiciera pública una nota diplomática de Estados Unidos en la que se afirma que, de obtener ese puesto no permanente, Chávez hará del máximo organismo de la ONU su "tribuna ideológica".
Para evitar que esto suceda, la Casa Blanca lanzó una intensa campaña de presión en los países de la región para que voten por Guatemala -aliado de Washington-, que también se postuló como candidato para el Consejo.
En ese sentido, el embajador norteamericano ante la ONU, John Bolton, afirmó ayer que no piensa que Venezuela pueda hacer una "contribución productiva" al Consejo de Seguridad. "Ya hicimos saber a través de nuestros canales diplomáticos cuáles son nuestras preferencias", dijo.
El diario Los Angeles Times publicó esta semana que, en el marco de su intensa campaña en la región, Washington le advirtió a Chile que no entrenará a sus pilotos para que puedan manejar los nuevos aviones F-16 estadounidenses que compraron, a menos que el país vote contra la candidatura de Venezuela.
Aunque el gobierno de Michelle Bachelet aún no definió su voto, su decisión es clave, ya que, por el momento, la Argentina, Brasil, Uruguay y Bolivia han anticipado que se inclinarán por Venezuela, y Estados Unidos necesita revertir esa situación.
Guatemala ya cuenta con el apoyo de los países de América Central, Colombia y Estados Unidos obviamente. Se espera que Perú, cuyo presidente electo Alan García mantuvo un fuerte enfrentamiento verbal con Chávez durante su campaña electoral, también elija a Guatemala.
El canciller venezolano, Alí Rodríguez, afirmó ayer que su país espera la ayuda de Chile para obtener ese codiciado escaño. "Como de todos los buenos amigos, esperamos el apoyo de Chile para lo que es un elemental derecho de un país como el nuestro. Y también el derecho que corresponde a todo país soberano que decide soberanamente, valga la redundancia, a quién apoya o a quién no apoya", dijo.
Por el momento, el gobierno chileno ha declarado que no tomó ninguna decisión y que aún falta para la elección, que se realizará en octubre próximo.
No obstante, ya estalló una fuerte polémica en el seno de la coalición gobernante, en una disputa para definir qué postura tomará el gobierno.
Las fricciones surgieron entre el ala más conservadora de la coalición representada por la Democracia Cristiana (DC), que se opone a la candidatura de Caracas, y el sector más izquierdista, liderado por el Partido Socialista (PS) y el Partido por la Democracia (PPD), que la apoyan.
Las disputas han puesto en una incómoda posición a Bachelet, que aún no comunicó la posición oficial de Chile. "Sin duda que voy a escuchar muchas opiniones y las voy a escuchar todas, pero la decisión final que tome, la decidiré en interés del país", dijo Bachelet.
En un intento por superar esta polémica que divide al gobierno, el canciller chileno, Alejandro Foxley, sugirió ayer que su país podría respaldar una tercera postulación de consenso.
Un documento diplomático norteamericano divulgado ayer por la BBC titulado "Vencer a Venezuela en su candidatura por un puesto en el Consejo de Seguridad de la ONU", queda clara la posición de Washington, que advierte sobre la posibilidad de que Caracas represente un obstáculo en las cuestiones "críticas" que serán tratadas en los próximos años.
"Venezuela intentará alterar el trabajo del Consejo de Seguridad y usarlo como tribuna ideológica en lugar de resolver problemas concretos", afirma el documento, que menciona la conducta "irresponsable" de Caracas en los organismos internacionales.
El tema Irán, la clave.
Actualmente, el máximo organismo de la ONU es el encargado de tratar, entre otros temas, el enfrentamiento de la comunidad internacional con Irán por su polémico plan nuclear. El consejo tiene la facultad de ordenar sanciones económicas y, en el peor de los casos, ordenar una intervención militar. La Casa Blanca teme que Chávez intente frustrar sus planes de presionar a Irán a través de la ONU, una carta que quiere reservarse en caso de que fracase la vía diplomática.
El Consejo de Seguridad está integrado por cinco miembros permanentes con derecho a veto y diez temporales, que se renuevan cada dos años. En octubre hay que elegir al sucesor de la Argentina, que deja su puesto en diciembre.
En este marco de tensión entre Caracas y Washington, Chávez dijo ayer que si alguien invade Cuba "también correrá sangre venezolana", en una implícita amenaza a Estados Unidos. "Estamos abrazados ante la historia hasta tal punto que hemos dicho que si a alguien se le ocurre invadir Cuba, correrá sangre venezolana."
[Fuente: La Nación, Bs As, Arg, 23jun06]
This document has been published on 27Jun06 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes. |