 | Este documento ha sido publicado el 15ago04 por el Equipo Nizkor y Derechos Human Rights |
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16jul04
El parlamento y la OEA rinden un homenaje póstumo al General Seregni.
El general Líber Seregni, de 87 años, quien fundó en 1971 la coalición de izquierda Frente Amplio y fue encarcelado una década por la dictadura militar que gobernó hasta mediados de los ochenta, falleció el sábado 31 de julio.
Tras ser velado en el Palacio Legislativo, fue sepultado domingo 1 de agosto con honores de Estado en el Panteón Nacional.
A sus 87 años, Seregni, derrotado dos veces en elecciones presidenciales (1971 y 1989) se despidió de la actividad pública en diciembre, en el último congreso del Frente Amplio, fuerza política que presidió desde su fundación en 1971 hasta 1995.
Uruguay le rindió su último homenaje el 19 de marzo pasado, con un acto en la Universidad de la República, al cumplirse 20 años de su liberación, tras más de 10 años de cárcel durante la dictadura militar
En la ceremonia en el Cementerio Central, le rindieron homenaje el líder del Frente Amplio Tabaré Vázquez, favorito candidato presidencial para las elecciones del 31 de octubre y el ministro de Educación y Cultura Leonardo Guzmán, quienes hablaron en nombre de la coalición de izquierdas y del Poder Ejecutivo, respectivamente.
El martes 10 de agosto de 2004 la Asamblea General tributó un homenaje al general (r) Líber Seregni, en el que legisladores de todos los lemas políticos coincidieron en reconocer las virtudes y la estatura de estadista que el líder histórico de la izquierda alcanzó a lo largo de su extensa trayectoria militar y política.
El homenaje también sirvió para enviar mensajes desde el Frente Amplio a las Fuerzas Armadas ante la eventualidad de un gobierno de la izquierda y para que en el Partido Colorado la figura del general motivara una alusión a uno de los líderes aún en actividad dentro de esa colectividad.
El senador tupamaro Eleuterio Fernández Huidobro del Movimiento de Participación Popular (MPP), dirigió durante su discurso un claro mensaje a los sectores del Ejército que se resisten a un acercamiento con el Frente Amplio y criticó a los retirados militares que no comprenden los cambios de sistema político y "como hormigas marcharán al socavón de la historia".
Dijo que la muerte de los grandes líderes como Luis Batlle, Luis Alberto de Herrera o el propio Seregni "consiguen cambiar cosas, producen conmociones; y Seregni conmovía y hoy todavía conmueve".
El senador tupamaro remarcó en su discurso que el domingo 1° de agosto, durante el cortejo fúnebre que avanzaba con el cuerpo de Seregni por la calle Yaguarón, se produjo un "encuentro histórico" entre el "Ejército (que esperaba formado para hacerse cargo del féretro del militar retirado) y la multitud frentista que traía en vilo al general".
Para Fernández Huidobro, el hecho de que Seregni recibiera honores de ministro de Estado fue un "gesto de nobleza de nuestros adversarios políticos, normal y esperable; fue un gesto de nobleza que sólo desafiaron algunas microscópicas actitudes".
El legislador recordó que el jueves 29, cuando se supo que el general Francisco Wins había colgado en la galería de honor de la División de Ejército II el retrato de Seregni, fue una día "intranquilo" y "llegaron a mi despacho rumores de acuartelamientos, y de tensas reuniones con el ministro de la Defensa y el presidente".
Luego, en referencia directa a los retirados militares que cuestionaron el cuadro de Seregni en la galería de honor, señaló: "Abruma saber que existan seres humanos tan mezquinos; una minúscula minoría hizo un escrache contra el Ejército, una minúscula minoría ajena al país, ajena a la historia; detritos de la historia".
El legislador, en cambio, contrastó esas actitudes con las del presidente de la República, y agradeció a los "enemigos de otro tiempo, pero de buena laya".
En su homenaje también se refirió al sentimiento antimilitar de sectores de la izquierda. "Sabiéndose morir Seregni pidió que su bastón de mando fuera con él; el mismo bastón que otrora cobardemente le quebraron.
Yo lo vi, el bastón estaba entero, y con él su último y tenaz mensaje: sigo siendo también un soldado. Ése fue su último mensaje, por algo que siempre reivindicó y fue muy criticado por ello", prosiguió.
El senador socialista José Korzeniak, portador de un saludo de Tabaré Vázquez que a su través se excusó de participaren el homenaje de la Asamblea General porque debía atender a algunos enfermos en estado grave, recordó varios pasajes de las actitudes que Seregni guardó durante su cautiverio en la dictadura militar y lamentó que "no pueda ver con sus ojos los cambios que tanto buscó".
Danilo Astori, en tanto, destacó la permanente búsqueda de consensos que practicó Seregni y el compromiso con sus ideas.
"Seregni era enemigo de dos expresiones: vota en contra que igual sale y vota a favor que igual no sale", recordó el conductor de Asamblea Uruguay.
En nombre del Partido Colorado hablo el vicepresidente Luis Hierro.
Consideró a Seregni "como uno de los hombres más notables que ha tenido el Uruguay en los últimos tiempos" y destacó como "obras maestras" de Seregni la construcción del Frente Amplio en 1971 y la conducción que hizo de la coalición a la salida de la dictadura.
A su turno el senador de la Lista 15 Alejandro Atchugarry comparó la figura del general con la del ex legislador y ministro colorado Héctor Grauert, lo que pareció ser una crítica a Batlle que lo desplazó para ocupar el primer lugar en la lista al senado del sector.
"Seregni es ese tipo de hombres como (Héctor) Grauert, que (para la elección de noviembre de 1984), antes de la división de la Lista 15 (en 1988), habiendo tenido todos los honores y pudiendo aspirar a cualquier cargo, pidió acompañar al partido como edil honorario", describió Atchugarry.
Grauert fue senador quincista antes del golpe de Estado del 27 de junio de 1973, y una de las figuras históricas de mayor peso que tenía el Batllismo Unido en la vuelta a la democracia.
Luego del episodio que relató Atchugarry, fue edil honorario y presidente de la Junta Departamental entre 1985 y 1990.
El legislador quincista, en otra clara referencia a su situación política actual, dijo haber recibido de Seregni "una lección de vida, porque cuando tuvo que ir al llano lo hizo con convicción y mantuvo intactas sus ideas".
"Creo que en momentos que no son fáciles, ese sentimiento superior de Seregni nos ha marcado a todos", culminó diciendo él ex ministro de Economía y Finanzas.
Por el Partido Nacional habló Francisco Gallinal, quien destacó la conducción política de Seregni que "rompió el bipartidismo y fortaleció la democracia".
"Como dijo insistentemente Seregni, el país necesita un entendimiento, el país está dividido y necesita una tregua para construir", afirmó.
En el medio de una sesión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), convocada el jueves 5 de agosto para discutir temas urgentes se hizo un minuto de silencio, se abrió para homenajear al ex presidente del Frente Amplio, Líber Seregni, fallecido el sábado 31.
El homenaje fue convocado por la presidenta del Consejo, la representante nicaragüense Carmen Gutiérrez, y agradecido por el embajador uruguayo Juan Fisher, quien destacó el "estoicismo" y la "templanza" de Seregni mientras estuvo preso durante la dictadura militar (1973-1985), así como su mensaje de "reconciliación" y "construcción" nacional cuando fue liberado.
Después manifestó su pesar el representante chileno Esteban Tomic, quien dijo que
Seregni reunió tres cualidades qué solían estar disociadas: la militar, la política y la demócrata.
Finalmente, el embajador de Venezuela, Jorge Valero, dijo que muchos latinoamericanos vieron en Seregni una "figura señera" y un "paradigma de la democracia" en el subcontinente.
Mientras tanto el 9 de agosto de 2004 el general retirado Iván Paulós, una de las figuras más importantes de la dictadura civil-militar que asoló el país entre 1973 y 1985, hizo pública una Carta Abierta.
De su texto surge que el Paulós no entiende la relación que existe entre la guerra, la política, y la economía.
El pobre hombre todavía no se dió cuenta de que las Fuerzas Armadas uruguayas (al igual que las del resto del Cono Sur) fueron utilizadas por el bloque en el poder para frenar las protestas populares derivadas de la aplicación de las rapaces políticas económicas puestas a andar en la década del 70 por los organismos de Bretton Woods.
Este viejo fascista tampoco se da cuenta de que se puede ganar la guerra y perder la paz, como ha sucedido tantas veces en la historia.
Pero no nos conmiseremos demasiado con este anciano indigno, porque para él, las
torturas, los asesinatos por tortura, las ejecuciones sumarias, las violaciones de mujeres, hombres y menores, el secuestro de niños, la ocultación de cadáveres y el latrocinio liso y llano, son simplemente: "dolorosas e indeseables secuelas que siempre tiene la guerra."
Al poner ese "siempre", el general Paulós demuestra que conoce muy poco de historia patria, porque el Ejército Oriental que comandó José Gervasio Artigas (del que éste otro se autodenomina "sucesor", nunca cometió las atrocidades que sí cometió el suyo.
A diferencia de aquél, éste ejército no tuvo ni tiene "clemencia para los vencidos."
A tal punto no la tiene, que no está dispuesto ni siquiera a decir qué hicieron con los cadáveres de los detenidos desaparecidos. No tienen clemencia ni para los vencidos, ni para los familiares de los vencidos.
żO será que lo que asusta tanto a Paulós es que realmente se está dando cuenta de que los vencidos fueron ellos?
[Fuente: Andrés Capelan de Comcosur, Montevideo, Uruguay, 12ago04]
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