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03dic05
Por una carta anónima con un mapa, encontraron un cráneo en el Batallón 13.
Una carta anónima que contenía un croquis hecho a mano permitió ayer a un grupo de antropólogos uruguayos hallar un cráneo en el Batallón 13 del ejército, cerca de Montevideo.
Así los confirmó el secretario de la presidencia de Uruguay, Gonzalo Fernández. El sitio del hallazgo es próximo al lugar donde el Equipo de Antropología Forense de Argentina estuvo realizando, en agosto pasado, excavaciones en procura de restos de detenidos desaparecidos de la dictadura uruguaya (1973-1985).
En ese cuartel militar es donde se buscan los restos de María Claudia García, nuera del poeta Juan Gelman. El pasado 21 de junio se había iniciado las excavaciones en el Batallón 13. Informaciones brindadas por los militares hicieron suponer que allí habría un cementerio clandestino, donde fueron inhumadas víctimas de la dictadura.
Fernández, quien además de secretario del presidente Tabaré Vázquez es su asesor en derechos humanos, dijo ayer que la pieza fue encontrada a unos 80 centímetros de profundidad y que no se pudo comprobar si el cráneo tenía un impacto de bala, como señalaron algunas versiones de testigos oculares.
El asesor presidencial confirmó que había recibido un sobre, enviado anónimamente por correo, que contenía un plano hecho a mano con un dibujo que entregó a los antropólogos, y que este croquis parece coincidir con el sitio donde se hizo el descubrimiento.
Aunque sólo se halló el cráneo, el resto del esqueleto estaría aparentemente todavía enterrado "de cúbito lateral izquierdo".
Fernández anticipó que se trabajará durante todo el fin de semana pese a que previamente se había indicado que se dedicarían esos días a la evaluación de los trabajos, tras el hallazgo de los restos completos de un desaparecido en una chacra cercana a la localidad de Pando, a 23 kilómetros de Montevideo.
Los restos de Pando al parecer pertenecen a Arpino Vega, un obrero de la construcción y militante del Partido Comunista desaparecido en 1974.
Las tareas de exhumación se realizan en momentos en que el Senado uruguayo debate un proyecto de interpretación de la polémica ley de Caducidad, que impide juzgar a militares y policías involucrados en la violación de derechos humanos durante la dictadura. La ley de Caducidad fue confirmada por la mayoría de los uruguayos en un referéndum en 1989 pero hay mucha polémica sobre qué casos abarca.
Tabaré Vázquez se comprometió, cuando asumió la presidencia, el primero de marzo pasado, a esclarecer el destino de decenas de detenidos desaparecidos e incluso hallar sus restos.
"Encontramos uno de más de 200 desaparecidos que buscamos: una parte mínima de la verdad" de la represión lanzada por la dictadura militar, afirmó ayer Luisa Cuesta, integrante de asociación de Familiares de Detenidos Desaparecidos (Famidesa) de Uruguay. Cuesta participó esta semana de una visita a la chacra de Pando.
[Fuente: Clarin, Bs As, ARg, 03dic05]
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