 | Este documento ha sido publicado el 27sep04 por el Equipo Nizkor y Derechos Human Rights |
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09jul04
El Caso del Cerro Quilish en Cajamarca:
cuando el Gobierno tira la piedra y esconde la mano.
Desde el pasado 30 de Junio, los diarios de Cajamarca afines a la empresa Minera Yanacocha, vienen anunciando el inicio de los Estudios de Línea de Base, que suponen la aprobación de la Evaluación Ambiental (EA) por parte de la Dirección General de Asuntos Ambientales (DGAA) del Ministerio de Energía y Minas (MEM), la cuál hasta la fecha aún no se ha producido.
Es por ello que hemos indagado sobre el particular, y el día de ayer, fuentes confiables de la DGAA del MEM, nos confirmaron que la Evaluación Ambiental de la empresa Minera Yanacocha S.R.L. (MYSRL) para iniciar actividades de exploración en el Cerro Quilish y zonas adyacentes, ya tiene un informe de aprobación y está a la espera de la resolución firmada de parte del Director General de Asuntos Ambientales, Ingº Julio Bonelli.
Esta situación se da, pese a que el Ministerio de Energía y Minas conoce del problema social en Cajamarca, donde gran parte de la población, especialmente la población de las zonas rurales y las comunidades campesinas, se han mostrado contrarias al inicio de la actividad minera en la zona del Cerro Quilish.
El Cerro Quilish, tiene una gran importancia para los cajamarquinos, puesto que se trata ecosistema frágil que incluye la presencia de microcuencas que abastecen a los ríos Grande, Porcón y Quilish. Los dos primeros, son los principales abastecedores de agua de la Planta de Tratamiento de Agua Potable “El Milagro” que aporta el 70% del total de agua que abastece a la población de la ciudad de Cajamarca. Es decir está en juego el futuro del agua de Cajamarca.
Lamentablemente, la empresa Minera Yanacocha S.R.L. (MYSRL) no ha buscado concretar espacios de diálogo con la población, ya que, pese a lo que digan, en todo momento rehuyó tratar el tema de la pretendida explotación minera del Cerro Quilish, como ocurrió durante su presencia en la Mesa de Diálogo (Espacio que reunía al Estado, la empresa y representantes de la sociedad civil), cuya organización estuvo a cargo de CTAR. Ahora, los representantes de la empresa MYSRL, desconocen la legitimidad de dicho espacio al no existir la CTAR, intentando reemplazar dicho espacio por otros menos plurales, donde pueda imponer una agenda pre - establecida.
El problema del Cerro Quilish no empieza ahora. En las zonas cercanas al Cerro Quilish, se han empezado a presentar problemas con el abastecimiento de agua para las comunidades campesinas de la zona, toda vez que sus canales de riego han sido cerrados. La comunidad de La Ramada, cercana al lugar, ha logrado seguir el procedimiento administrativo para revertir esta situación y ha logrado obtener una resolución del Ministerio de Agricultura ordenando la reapertura de su canal de riego.
Ciertamente este triunfo es solamente una brisa frente a los grandes problemas de contaminación que el medio ambiente y la población de Cajamarca atraviesan hoy y que, lamentablemente, se agudizarán en el futuro cercano. Y es que la empresa auditora colombiana INGETEC, a través de su representante el Ingeniero José Mariño, ha reiterado que las acciones que pueda emprender Yanacocha con el equipo que tiene, son sólo avances para solucionar el vigente problema de contaminación de las aguas que se ha generado, pero no son suficientes. Y es que la magnitud de la explotación minera en la zona hace que los parámetros que la normatividad peruana tiene actualmente no sean suficientes para decir que no se está generando contaminación.
El pretender realizar actividad minera en el Cerro Quilish a toda costa, como busca hacerlo MYSRL, desconociendo la posición de la población de Cajamarca y especialmente de las comunidades campesinas frente a ello, sólo estaría generando la lógica reacción de la población que puede culminar en lamentables hechos de violencia, de los cuáles ya estamos cansados en el país. Asimismo resultaría penoso y lamentable tener que acudir a un nuevo escenario de violencia en el que el gobierno peruano pretenda achacar la misma a grupos violentistas (lo que se ha dicho sin ningún fundamento en el caso de Cajamarca), cuando sabemos como se está sembrando la discordia e indignación en la población, estando en manos del propio Estado el revertirlo, ya que es el MEM quien decidirá si se puede o no iniciar una actividad minera en el Cerro Quilish.
Lamentablemente la posición facilista del gobierno, de una total inacción, se puede ver en las palabras de representantes del Ministerio de Energía y Minas, quien sólo atina a decir que “no puede hacer nada frente a la situación, porque como ente administrativo, si se cumplen los requisitos que pide, tiene que extender el permiso”, y deja toda la responsabilidad a la empresa Minera Yanacocha, afirmando que “si hay problemas sociales ellos deberían decidir no realizar actividad minera en la zona”.
¿ Quién será más pecador, quien peca por acción o por omisión ?. Sólo Dios sabe. Lo cierto es que a la empresa Minera Yanacocha no le interesa afectar el agua de los cajamarquinos con tal de obtener más riqueza para sus socios, teniendo como cómplice a un gobierno sin reacción alguna y que sólo busca culpar de sus desaciertos a supuestos “grupos violentistas”, cuando se trata de la población que protesta de manera justa por la afectación de sus derechos fundamentales, los que debería hacer respetar el propio Estado, como reza la Constitución.
Lima, 09 de Julio de 2004
Javier Jahncke Benavente
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| Este documento ha sido publicado el 27sep04 por el Equipo Nizkor y Derechos Human Rights |