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09oct06
Giampietri afirma que militares sufren una persecución judicial.
Alan García no asistió a la ceremonia naval en homenaje a Miguel Grau. No informó las razones
Una defensa cerrada en favor de las Fuerzas Armadas volvió a hacer ayer el primer vicepresidente de la República, Luis Giampietri, aunque esta vez durante la ceremonia por el aniversario 185 de creación de la Marina de Guerra y el recuerdo de la inmolación del Gran Almirante Miguel Grau.
Giampietri, quien acudió a la ceremonia celebrada en el Callao, en reemplazo del presidente Alan García, hizo más que evidente su posición al vestir el uniforme de vicealmirante, el cual había cambiado por los ternos cuando pasó a la situación de retiro.
"Ingratamente muchos hombres de uniforme son objeto de una persecución injusta mediante procesos judiciales inducidos por intereses ajenos a los valores de justicia", afirmó el primer vicepresidente, quien agregó que los marinos asesinados por los terroristas "nunca fueron defendidos por ningún organismo de derechos humanos y han pasado a la opinión pública en calidad de soldados desconocidos".
Condenan al Terrorismo
Para Carlos Rivera, asesor legal del Instituto de Defensa Legal (IDL), Giampietri se equivoca al señalar que los procesos judiciales que se han iniciado contra algunos miembros de las Fuerzas Armadas son una persecución.
"Esos procesos se iniciaron como consecuencia de la existencia de pruebas jurídicas suficientes de violación de derechos humanos", sostuvo.
Rivera también negó que el sacrificio de los miembros castrenses no haya sido reconocido y recordó que en el informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación se consignan las cifras de uniformados que fallecieron en actos de naturaleza terrorista.
"Los organismos de derechos humanos han condenado abiertamente las muertes perpetradas por el terrorismo contra efectivos de la Marina, porque han sido muertes injustas cometidas por un grupo demencial", indicó.
Extraña Ausencia
Aunque no es la primera vez que un jefe de Estado no concurre al homenaje a Grau (Fujimori faltó en 1996 y 1998), sí llamó la atención que Alan García no lo hiciera, en especial porque, en lo que va de su gestión, ha tenido actividades de trabajo los domingos.
Según la Secretaría de Prensa de Palacio de Gobierno, García se excusó y envió en su representación al primer vicepresidente Giampietri. No se dieron mayores explicaciones ni tampoco se informó si el mandatario se encontraba indispuesto.
La ceremonia en homenaje a la Marina y a Miguel Grau se desarrolló sin contratiempos. Sin embargo, lo que llamó la atención fue que, en vez de una ofrenda floral, se arrojase al mar un arreglo de tecnopor en honor al Caballero de los Mares.
Opinión: Quiso mostrar su espíritu de cuerpo
Nelson Manrique, Historiador
La lectura más obvia de por qué Luis Giampietri asistió con vestimenta militar es la intención de mostrar un espíritu de cuerpo con la Marina (su arma) en el tema de las acusaciones por la violación de los derechos humanos.
Pero la Marina se siente orgullosa --y con justicia-- de Miguel Grau, quien no era capaz de asesinar ni a rendidos ni a heridos. Grau fue capaz de recoger a los soldados chilenos que caían de las embarcaciones cuando estaban inermes. Algo muy diferente al caso de los asesinatos de reos rendidos en El Frontón, en 1986.
[Fuente: El Comercio, Lima, 09oct06]
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