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04dic15


Juan Carlos I visita a las monarquías absolutistas del Golfo en nombre del estado español


El Rey emérito visitó en los últimos días Oriente Medio como ya hizo a comienzos de año. En Arabia Saudí fue recibido y agasajado por Salman, el monarca local, con quien conversó de diversos asuntos, entre otros de economía. Al menos, eso cabe deducir de lo poco que trascendió de la conversación, en forma de confesión del Rey Salman: "No es el mejor momento para hacer negocios aquí".

Hace aproximadamente un año y medio que Juan Carlos I no ocupa el trono del Reino de España pero, por lo que parece, no ha perdido el interés por el mundo de los negocios, con el que se la ha relacionado en múltiples ocasiones. En su última visita por Oriente Medio, el rey emérito arrancó al monarca de Arabia Saudí, Salman, una confesión poco halagüeña sobre el futuro económico del país asiático. "No es el mejor momento para hacer negocios aquí", aseguró el rey saudí.

Tras un amplio periplo por la región, que llevó a Juan Carlos I por Bahréin, Jordania y Abu Dhabi, con escala en el Gran Premio de Fórmula 1 incluido, el rey emérito aterrizó en Arabia Saudí, donde fue recibido y notablemente agasajado por Salman. La agenda de Juan Carlos I incluyó un gran banquete pero también hubo tiempo para mantener entrevistas privadas, en presencia del príncipe heredero y también de algunos miembros del Ejecutivo saudí.

En estas conversaciones, ambos monarcas hablaron de asuntos relacionados con la economía y, más concretamente, de las posibilidades de negocio en Arabia Saudí, según asegura una fuente empresarial con contactos en el Gobierno local. Uno de los mensajes que trasladó el rey Salman al monarca emérito español sorprendió a parte de los asistentes al encuentro, especialmente por el pesimismo que encerraba, al asegurar que el país asiático no atravesaba el mejor momento para hacer negocios.

Sin embargo, la confesión también sorprende por el hecho de que el rey Salman hiciera la declaración en un tipo de encuentro como éste, por lo que parece claro que el monarca saudí respondió a una cuestión planteada por Juan Carlos I, interesado en conocer cuál era el clima para llevar a cabo futuros proyectos en el país.

Divisiones en la familia real

Actualmente, la economía saudí está fuertemente golpeada por la prolongada caída de los precios del petróleo, fuente de una parte muy importante de los ingresos del país. Sin embargo, la fuente asegura las autoridades locales no suelen pronunciarse sobre esta cuestión que, incluso, está provocando fuertes disensiones no sólo en el Ejecutivo sino también en el seno de la familia real.

¿Confesión directa para una pregunta muy directa? Es el escenario más probable de la entrevista y lo que hizo que las palabras del rey Salman llamaran la atención de los testigos del encuentro, aunque el secretismo sobre este tipo de reuniones es extremo.

Mucho se ha escrito sobre el papel que ha representado el antiguo jefe de la Corona en el mundo de los negocios, especialmente en Oriente Medio, donde goza de un gran predicamento gracias a su estrecha relación con las familias reales de los países de la región. Juan Carlos I fue considerado un pilar básico para que un consorcio español se hiciera con el contrato de construcción de la línea de alta velocidad La Meca-Medina, valorado en más de 6.000 millones de euros.

Muy pendiente del AVE a La Meca

De hecho, el monarca español no dio por finalizado su trabajo con la firma del contrato y ha estado muy pendiente de la evolución del contrato, más si cabe en los últimos meses, cuando los retrasos acumulados en los trabajos han estado a punto de provocar la rescisión unilateral del acuerdo.

Como informó Vozpópuli, Juan Carlos I aprovechó su visita a la región a comienzos de año para trasladar al Gobierno y la familia real saudí un mensaje de parte de las empresas españolas que construían el llamado 'AVE de los peregrinos': las obras finalizarían en tiempo y forma.

Tras esta visita del monarca, el clima de tensión en torno al proyecto fue en descenso aunque algún episodio protagonizado por el ministro de Transportes local, Mohamed Al-Muqbel, estuvo a punto de volver a encender la mecha. De acuerdo con las fuentes consultadas, Al-Muqbel no estuvo presente en las entrevistas mantenidas por Juan Carlos I en Arabia Saudí en los últimos días.

Pero el interés de las empresas españolas en Arabia Saudí trasciende el contrato del AVE. De hecho, Juan Carlos I acompañó en numerosas ocasiones a empresarios en viajes comerciales a la zona, que derivaron posteriormente en jugosos negocios para grandes grupos de infraestructuras, empresas tecnológicas y de servicios. A la vista del contenido de la conversación entre el rey Salman y el monarca emérito español, algunos elementos permanecen en el tiempo pese a que Juan Carlos I ya no ocupa el trono.

[Fuente: Por Raúl Pozo, Vozpópuli, Madrid, 04dic15]

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