EQUIPO NIZKOR |
|
02jul10
El Rey pidió al empresario Arturo Fernández que colocara a dos ex altos cargos de La Zarzuela
Las excelentes relaciones que el Rey mantiene con Arturo Fernández, dueño del grupo empresarial Arturo Cantoblanco, y los favores prestados por éste a Don Juan Carlos, han acabado abriendo las puertas de La Zarzuela al también presidente de la patronal madrileña (CEIM) y vicepresidente de la CEOE. El monarca pidió incluso a Fernández que colocara en su empresa al antiguo jefe de su Cuarto Militar, el almirante Antonio González-Aller, y que diese trabajo en la CEIM a su ex subdirector de Comunicación, el periodista Jordi Gutiérrez. Ambos trabajan ahora a las órdenes de Fernández.
González-Aller sustituyó en 2002 al teniente general Gonzalo Rodríguez de Austria como jefe del Cuarto Militar de la Casa del Rey, un cargo que convierte a su titular en primer ayudante de campo de Don Juan Carlos y máximo responsable de la Guardia Real. El almirante dejó La Zarzuela en diciembre de 2006, tras su pase a la reserva, y pocos meses después, en 2007, fue fichado por Fernández como director de Relaciones Institucionales del Grupo Arturo Cantoblanco gracias a la intermediación del monarca, según fuentes muy cercanas al empresario consultadas por El Confidencial.
Don Juan Carlos volvió a llamar a su amigo Fernández a finales de 2009 para que colocara a otro ex alto cargo de la Casa Real: el periodista Jordi Gutiérrez. Éste abandonó el pasado mes de enero La Zarzuela, donde había permanecido durante los últimos 16 años como subdirector de Comunicación, y se fue también de la mano del empresario hostelero. Gutiérrez, a diferencia del almirante González-Aller, no se incorporó al Grupo Arturo Cantoblanco, sino a la CEIM, como máximo responsable del departamento de Comunicación de la patronal madrileña.
Presumía de su amistad
"Arturo Fernández se quejaba a veces de que, cada vez que cesaba un alto cargo de La Zarzuela, el Rey lo llamaba para que lo colocase en su empresa o moviese sus influencias para encontrarle un buen puesto", apuntan las fuentes consultadas. "Pero en realidad lo decía con la boca pequeña, porque le gustaba presumir de su amistad con Don Juan Carlos y de los favores que le hacía", añaden las mismas fuentes.
El presidente de la CEIM y vicepresidente de la CEOE, según informaba ayer El Confidencial, compró al Rey por 100.000 euros un Maserati Quattroporte valorado en 150.000 euros que un jeque árabe le había regalado al monarca. Fernández, dueño de una vasta colección de automóviles de lujo, reconoció a este periódico que adquirió la berlina a Don Juan Carlos, pero aseguró que éste la había comprado en la casa Maserati y pagado de su propio bolsillo.
Además del almirante González-Aller y el periodista Jordi Gutiérrez, el Rey también avaló el fichaje del diplomático Juan González Cebrián, director de Comunicación de La Zarzuela y jefe directo de Gutiérrez, por el empresario Juan Miguel Villar Mir, propietario del Grupo OHL y buen amigo del monarca. Tras más de seis años al servicio de Don Juan Carlos, González Cebrián se incorporó el pasado mes de enero a OHL como responsable de las relaciones institucionales con los países donde el grupo de Villar Mir ya está presente o aquellos donde pretende implantarse.
[Fuente: Por Pedro Lobo, El Confidencial, Madrid, 02jul10]
This document has been published on 13Jul10 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes. |