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04jul10
CiU tira las redes para reclutar a los socialistas desencantados con la marcha de Castells
Tres días después de que se conociera la decisión del conseller de Economía y dirigente socialista catalán, Antoni Castells, de no concurrir en las próximas elecciones catalanas de otoño, los nacionalistas ya quieren hacer leña del árbol caído. Eso es lo que se transmite en los pasillos de la sede de la federación de CiU que lidera Artur Mas en vísperas de que sus líderes inicien las vacaciones.
"Es evidente que Castells representa al sector más catalanista del PSC y si él no está en las listas del PSC junto con José Montilla, muchos socialistas alejados de las posiciones menos catalanistas podrán verse huérfanos y nosotros debemos intentar atraerlos". Así se expresan fuentes de CiU a El Confidencial para mostrar que los nacionalistas esperan sacar rédito electoral del embrollo que el anuncio de Castells ha provocado en el PSC.
El propio Artur Mas ya expresó el pasado domingo "el lío" en el que están inmersos los socialistas catalanes y el hecho, en su opinión, de que el candidato y actual presidente catalán José Montilla deba enfrentar una precampaña electoral con las encuestas desfavorables "de forma cada vez más en solitario". Ante esta situación, la federación nacionalista espera que "se produzca una huida hacia la abstención o incluso a CiU de los dirigentes y las bases más catalanistas del PSC", a pesar de que desde el partido socialista catalán se haya respetado la decisión de Castells y de que Montilla parece que no le haya afectado demasiado el anuncio de su consejero de Economía.
Un dirigente socialista recuerda a este diario la capacidad que tiene el PSC "de reponerse en las citas electorales, como ha ocurrido en las dos últimas legislaturas que ha logrado conformar gobierno gracias a su programa social y al fuerte arraigo en los cinturones urbanos de Cataluña". El sector catalanista del PSC, seriamente debilitado, está liderado por el conceller de Educación, Ernest Maragall y las conselleras de Justicia, Montserrat Tura y de Sanidad, Marina Geli.
El secretario general adjunto de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) y dirigente del sector más soberanista de la federación CiU, Felip Puig, considera que la renuncia de Antoni Castells simboliza el "fracaso" del sector catalanista dentro del partido que lidera José Montilla. "Los catalanistas del PSC aspiraban a recuperar la nación catalana con la colaboración de un socialismo español que, sin embargo, les ha mostrado su cara más hostil", afirmó ayer Puig.
Otras destacadas ausencias
El dirigente nacionalista recordó otros destacados miembros del actual gobierno tripartito catalán que no concurrirán en las próximas elecciones lo que, a su juicio, demuestra la "debilidad" ante la que PSC, ERC e ICV se presentarán a la cita electoral de otoño. Puig sumó a la renuncia de Castells, la ausencia del vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod Rovira (ERC), y del conseller de Interior, Joan Saura (ICV). Y añadió: "Todos están siendo devorados por la dinámica de esta fórmula de gobierno que ha fracasado".
Puig aseguró que Castells no sólo está decepcionado por el fracaso del sector catalanista del PSC, sino que el conseller "hacía tiempo que estaba incómodo por su mala gestión como titular de Economía". "La Generalitat está más endeudada que nunca", dijo. Mientras los nacionalistas se reconfortan por la crisis que ha abierto en el PSC la retirada de Castells, CiU sigue insistiendo en que si consigue volver a gobernar la Generalitat "mantendrá su intención de que Cataluña avance hacia el derecho a decidir libremente en la próxima legislatura".
Esto significa que convocará la celebración de un referendo o de una consulta oficial para que los ciudadanos de Cataluña decidan si quieren seguir en el marco autonómico español o convertirse en un Estado propio. Felip Puig empleó un lenguaje directo para exprimir las intenciones de los nacionalistas: "Si CiU gana las elecciones de otoño construirá el camino para que Cataluña sea un Estado de la UE lo antes posible, aunque no apostaremos por la independencia en la próxima legislatura". Y añadió: "żAlguien duda que aspiramos a la máxima soberanía y que por descontado lideraremos ese proceso si es un deseo compartido por una mayoría?, pero ahora lo prioritario es reconstruir la confianza y combatir la crisis porque si no nos recuperamos económicamente es imposible cumplir nuestros anhelos nacionales", aseveró.
[Fuente: El Confidencial, Madrid, 04jul10]
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