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26may13
Los banqueros temen que el caso Blesa se convierta en una causa general contra el sector
El caso Blesa ha abierto la caja de pandora contra el sistema financiero. El encarcelamiento del expresidente de Caja Madrid, aunque fuera menos de 24 horas, ha generado muchas tensiones tanto en el sistema financiero como en el político. El desfile de banqueros que han pasado esta semana por los tribunales se añade al ya centenar de directivos de cajas de ahorros que se encuentran inmersos en un proceso judicial. Sin embargo, ni jueces y fiscales pretenden construir una especie de causa general contra el sistema financiero. Su intención, según se puede palpar en los ambientes judiciales, es la de juzgar caso por caso con el Código Penal en la mano y no criminalizar al mundo económico.
Esta visión es totalmente contraria al sentimiento que tiene gran parte de los banqueros del país, que temen una especie de linchamiento al sector como consecuencia de la crisis económica por parte de miembros del Gobierno y agentes sociales. Como expresó públicamente el presidente del Banco Popular, Ángel Ron: "la banca se ha convertido en el chivo expiatorio de la crisis" porque "atacar sus salarios es relativamente fácil".
Este sentimiento se ha generalizado entre los hombre de negocios, sobre todo tras la comparencia de los tres grandes banqueros españoles, Emilio Botín, Isidro Fainé y Francisco González, en la Audiencia Nacional, que fueron recibidos con pancartas y gritos de manifestantes que coreaban lemas como "¿dónde está nuestro botín?" o "si lo sacan en furgón, que lo lleven a prisión".
Sensación de "linchamiento"
Los presidentes del Banco Santander, Caixa Bank y BBVA fueron citados por el juez Fernando Andreu como testigos dentro de la causa que se investiga al expresidente de Bankia, Rodrigo Rato, por la fusión y la salida a bolsa de la entidad. La crítica vertida por el sector financiero es que fueron obligados a hacer el paseíllo y pasar por el trago de ser abucheados por afectados de las preferentes. Sin embargo, fuentes jurídicas recuerdan que no se les puede tratar con diferente rasero que a otras personas y si el juez considera que su testimonio es relevante para la instrucción de la causa tendrán que acudir.
El consejero delegado de una importante entidad financiera reconocía recientemente de manera confidencial: "hemos cometido muchos errores en la concesión de créditos hipotecarios, con la manera en que se ha tratado las primas únicas, pero esto no es óbice para pensar que el país puede funcionar sin entidades de crédito".
Según afirma parte del sector económico, el linchamiento del sector financiero solamente produciría un agravamiento de la crisis y un incremento del sufrimiento de quienes lo están pasando peor. Intentar generalizar los malos comportamientos a todo un sector es una auténtica perversión. Se argumenta que en esta crisis ha habido entidades como Bankia que han necesitado grandes inyecciones de capital pero que ha habido otras entidades como el Santander, BBVA o La Caixa que no solamente no han necesitado ningún tipo de ayuda pública sino que han seguido pagando sus impuestos.
Estas mismas fuentes afirman que actualmente la banca española es una de las más saneadas del mundo y un sector en el que se basa la recuperación económica en el medio y largo plazo.
Sin embargo, no es esto lo que piensa la opinión pública. Según los últimos estudios que maneja el Gobierno, la inmensa mayoría de los ciudadanos piensa los más de seis millones de parados que existen en España han sido culpa en buena medida del sector financiero, de las grandes constructoras y de las multinacionales.
Ante esta situación, la Justicia, según afirman jueces y fiscales en privado, se ha limitado a cumplir con su obligación. Las causas que se siguen en los juzgados no son únicamente iniciativas de acusaciones populares, como pueden ser Manos Limpias, Unión Progreso y Democracia (UpyD) o la plataforma 15-M. La Fiscalía Anticorrupción está prácticamente detrás de todas las investigaciones que se están llevando tanto en la Audiencia Nacional como en otros juzgados.
Celeridad en los procesos
Es más, el fiscal general del Estado, Eduardo Torres Dulce -nombrado por este último Gobierno-, ha hecho saber a sus fiscales que es esencial que las causas se tramiten con celeridad y no dejarlas dormir en un cajón. De esta manera se pretende acabar con la sensación de impunidad de ciertos sectores, contra los que se inician causas que nunca llegan a su fin. El principal representante del Ministerio Público, según fuentes próximas a él, busca sentar en el banquillo de los acusados con prontitud a todo aquel contra quien existan suficientes indicios de criminalidad y evitar a toda costa dilaciones. Un caso ejemplar ha sido el de Caixa Penedés. El juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz ha concluido en menos de un mes la investigación desde que Anticorrupción presentó la querella y ha procesado cuatro exdirectivos, sobre los que existen indicios de que obtuvieron "ilícitamente una desproporcionada ganancia patrimonial a costa y a espaldas de la entidad", para su jubilación. Ya están pendientes de que se fije fecha de juicio.
Sin embargo, el caso Blesa no ha seguido la pauta generalizada del resto de causas. En esta investigación, la Fiscalía de Madrid se ha opuesto desde el principio a investigar el crédito concedido por el expresidente de Caja Madrid a uno de los miembros del Consejo de Administración, el empresario Gerardo Díaz Ferrán, de 26,5 millones de euros cuando iniciaba un proceso de quiebra con Viajes Marsans. Tampoco ha visto indicios de delito por la compra del City National Bank de Florida (CNBF), causa que llevó a Blesa a prisión la semana pasada bajo una fianza de 2,5 millones de euros.
En este caso, la decisión la tomó un juez, Elpidio Silva Pacheco, respaldado por la acusación Manos Limpias y tras un auto fuertemente criticado por sus frases que algunos califican de antijurídicas. A pesar de estas críticas, el instructor no parece que vaya a tirar la toalla y ha imputado a los seis miembros del Comité Financiero -tres de ellos han declarado esta semana y los otros tres lo harán la próxima- y no descarta actuar contra todo el Consejo de Administración de Caja Madrid.
Casi un centenar de directivos inmersos en procesos
Fuentes de la carrera judicial señalan que este caso no se puede utilizar como paradigma y compararlo con el resto para tirar por tierra todas las investigaciones judiciales. De momento, hay más de 90 directivos procesados en nueve causas abiertas en Bankia-Caja Madrid, Banca Cívica, CAM, Banco de Valencia, Caixa Penedés, Caja Castilla-La Mancha y Eurobank, que podrían aumentar si avanza la denuncia presentada por Adicae contra Catalunya Banc. Se da por sentado que se sumarán a la lista los 20 miembros del consejo de Bankia.
Otro de los problemas que reflejan estos procesos judiciales es que los presuntos implicados provienen también del sistema político y social. Un ejemplo es el consejo de Bankia, imputado al completo y compuesto por representantes del PP, PSOE a IU, la patronal CEOE, y los sindicatos UGT y CCOO.
[Fuente: Por C. Guindal, El Confidencial, Madrid, 26may13]
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