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04dic10
"Estado de alarma" en España.
El gobierno español declaró el sábado un "estado de alarma" sin precedentes en un intento para poner fin a una huelga de controladores de tráfico aéreo que casi ha paralizado los vuelos en el país y dejado varados a miles de viajeros.
Las autoridades afirmaron que quienes rehúsen regresar a sus puestos de trabajo podrían afrontar diversos periodos de prisión.
El vicepresidente del gobierno Alfredo Pérez Rubalcaba dijo que la mayoría de los aeropuertos españoles estaban paralizados y ofreció sus disculpas a los viajeros que tuvieron que pasar la noche del viernes en los aeropuertos en lo que se supone sería el inicio de un fin de semana largo.
El lunes y miércoles de la próxima semana son feriados en España y mucha gente pensaba tomarse también el martes. Por lo general esta es una de las semanas de mayor tránsito de viajeros durante el año en España.
Los controladores de tráfico aéreo comenzaron su huelga el viernes por la noche debido a una disputa prolongada con el gobierno en torno a las condiciones laborales, horarios de trabajo y prestaciones.
La gota que darramó el vaso para los huelguistas fue el decreto que aprobó el viernes el gabinete y el cual prevé que los controlares que falten a sus turnos por enfermedad deben compensar las horas perdidas y pueden ser sujetos a revisión médica inmediata si se reportan enfermos.
El gobierno dispuso que las fuerzas militares asumieran las actividades en los centros de control de tráfico aéreo y torres de control.
Imágenes de la televisión española mostraban multitudes de viajeros que deambulaban el sábado en los aeropuertos españoles. La aerolínea de bandera Iberia canceló todos sus vuelos internos hasta la mañana del domingo. La aerolínea irlandesa Ryanair también canceló todos los vuelos desde y hacia España.
Rubalcaba dijo que los controladores deberán acudir a sus trabajos y, si no lo hacen, pueden ser acusados de un crimen bajo el código penal militar. Si se los declara culpables, podrían ir a la cárcel.
Los controladores no se presentaron a trabajar la noche del viernes como parte de una larga disputa sobre sus condiciones laborales y luego que el presidente José Luis Rodríguez Zapatero y su gabinete aprobaron un paquete de medidas de austeridad que incluye la privatización parcial de aeropuertos y el gerenciamiento por empresas privadas de las estaciones aéreas de Madrid y Barcelona.
El Ministerio de Defensa asumió el control del espacio aéreo nacional ante la emergencia, pero los militares no están entrenados para operar los equipos civiles.
El aeropuerto internacional madrileño de Barajas seguía cerrado luego que sólo se presentaron 15 de los 77 controladores programados para el turno de la mañana, dijo la agencia nacional del sector Aena.
Los controladores y Aena llevan un año trabados en amargas negociaciones sobre salarios, condiciones laborales y beneficios. La disputa empeoró en febrero luego que el gobierno limitó las horas extra, lo que redujo el salario anual promedio de los trabajadores de unos 350.000 euros (463.000 dólares) a unos 200.000 euros (264.000 dólares).
[Fuente: AP, Madrid, 04dic10]
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