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21dic05
Techint se convierte en el primer fabricante de acero de Latinoamerica.
El día de Nochebuena habrán pasado apenas cuatro meses desde que el grupo Techint se hizo cargo de la acería mexicana Hylsamex, las juntó con sus otras acerías, Siderar y Sidor, y constityó Ternium, el principal fabricante de acero del continente. En apenas 120 días el grupo que encabeza Paolo Rocca tuvo tiempo suficiente para comenzar el desembarco en la poderosa empresa azteca, pero sobre todo debió negociar contra reloj —y con no pocas gestiones del Gobierno argentino— para evitar que el gobierno de Hugo Chávez avanzara con su amenaza de reestatizar Sidor, la acería venezolana que constituye una de las tres patas en las que se apoya la flamante Ternium.
Daniel Novegil, director ejecutivo de Ternium, viene de un 2005 que repartió entre los frentes de México y Venezuela. Ayer, en una conversación con Clarín, admitió que quieren comprar más compañías para agrandar a Ternium. "Siempre observamos oportunidades, dentro del continente americano. Tenemos planes de expansión, que haremos a partir del aumento de nuestra capacidad productiva. Pero otra manera posible de expandirnos es con la compra de otras compañías", dijo.
Techint era dueño de Propulsora Siderúrgica, una fabricante de chapa de Ensenada que abastecía a automotrices como Renault, cuando en 1992 se adjudicó la privatización de la estatal Somisa e integró las dos empresas en Siderar, desde entonces la dueña de la chapa que se produce en la Argentina. En 1997, el grupo avanzó en la privatización de su competidora venezolana Sidor. A través del consorcio Amazonia, Siderar se adjudicó 60% de la acería venezolana.
A fines de 2004, ya con Novegil como CEO, Siderar se anotó en la licitación privada del gigante siderúrgico Hylsamex. Ganó la compulsa a cambio de 2.217 millones de dólares, que salieron desde varios bolsillos:
# Aproximadamente 60% fueron aportado por accionistas, empresas controladas y también por Usiminas. La acería brasileña puso acciones y US$ 100 millones en efectivo, a cambio de un 16% de Ternium.
# El 40% restante lo puso un sindicato de bancos, liderado por Citibank.
"Si ahora se presentara otra oportunidad, podemos seguir endeudándonos en el mercado internacional a tasa razonable", agregó ayer Novegil, en un alto del seminario Pro-Pymes, que organizó el grupo.
—¿Pero un sofocón como el que pasaron en Venezuela no les encarecería la tasa?
—No, porque se compensaría con el bajo costo que pagamos en ese país en energía y también en mineral de hierro.
El precio del mineral de hierro, la materia prima con que se fabrica el acero, fue el nudo del conflicto entre Techint y Chávez. Caracas planteó que perdía 250 millones de dólares anuales por vender el mineral subsidiado, a 56% por debajo de su cotización internacional. Le reclamó al grupo que negociara otro precio y, cuando la negociación se estancó, amenazó con reestatizar a Sidor. Lo cual hubiera dejado al "tres eterno" que significa Ternium sin una de sus tres patas.
El conflicto se zanjó en noviembre en Mar del Plata, durante la Cumbre de las Américas, en reuniones entre Rocca, Novegil, el propio Chávez y su canciller Alí Rodríguez, que fueron organizadas personalmente por el ministro de Planificación, Julio De Vido. Finalmente acordaron una rebaja en el descuento del hierro, a un máximo de 25%. Pasada la tormenta, volvieron las palabras conciliadoras. "Chávez nunca habló de expropiación, sino de comprarnos nuestra parte", relativizó ayer Novegil.
[Fuente: Clarin, Bs As, Arg, 21dic05]
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