EQUIPO NIZKOR |
|
03ene10
Cuba busca diversificar su industria azucarera
Empeñada en reactivar la producción azucarera, otrora primer renglón económico del país, Cuba realiza su actual cosecha anual con una "modesta" perspectiva productiva, aunque con un ambicioso proyecto de diversificación.
Hace unos días, el diario oficial "Granma" anunció que la isla esperar alcanzar una "modesta" producción de azúcar, pero no reveló la cantidad, aunque algunos expertos consideraron que sería de unas 1,5 millones de toneladas del dulce.
Prensa y especialistas coincidieron en que la cosecha tuvo una buena arrancada, "con puntualidad y eficiencia" en la llamada "Zafra chica", una etapa primaria que se inicia en noviembre y concluye el 31 de diciembre.
Durante la "Zafra chica" trabajaron siete fábricas en la molienda, a las que se unieron otras 37 al comenzar enero, para sumar 44 que intervendrán en la cosecha que cada año se extiende hasta mayo.
En su búsqueda por la diversificación, la industria azucarera cubana pretende también producir casi 196.000 toneladas de la llamada "Miel B", destinada a la alimentación animal, y más de 300.000 toneladas de miel final que se emplea en la producción de alcoholes.
Para garantizar esos objetivos, entre otras medidas el Ministerio de la Industria Azucarera decidió eliminar la tradicional pausa laboral de verano y trabajar en la preparación de tierras y mantenimiento de maquinarias durante junio, julio y agosto.
Según cifras oficiales, Cuba produjo 1,4 millones de toneladas de azúcar en la cosecha 2007-2008, lejos de los altos niveles de otros años y que convirtieron a esa industria en el primer rubro económico del país.
En su calidad de mayor exportador mundial de azúcar durante el siglo XX, la isla llegó a producir 8,5 millones de toneladas en 1970, año en el que intentó producir 10 millones de toneladas.
En la pasada década de los 90, la industria comenzó a declinar tras la pérdida de financiamiento y del mercado preferencial por la desintegración del campo socialista europeo, que abrió paso al desarrollo de una pujante y exitosa industria turística.
Desde 2002, Cuba aplicó una profunda reforma de la industria azucarera, agobiada por los bajos precios del dulce en el mercado internacional y los altos costos productivos, en un entorno económico difícil.
De los 156 ingenios que había en la isla, sólo quedaron 85 en funciones en una primera etapa, pero después otras fábricas fueron cerradas y desmanteladas.
Esa reforma incluyó, además, la reducción gradual de las tierras dedicadas al cultivo de la caña de azúcar, y de 1,5 millones de hectáreas pasaron a poco más de 700.000, además de que más de 100.000 trabajadores expertos pasaron a realizar otras labores.
Esa trasformación, denominada "Tarea Alvaro Reynoso", en homenaje a un prominente científico azucarero cubano, pretendió lograr una mayor eficiencia y rentabilidad en la industria.
Sin embargo, tras un repunte de precios en el mercado internacional, el gobierno cubano comenzó a reactivar la producción mediante planes de cultivo intensivo y la modernización de la maquinaria.
Cuba consume al menos 700.000 toneladas anuales de azúcar y otras 400.000 toneladas son destinadas a cumplir un acuerdo comercial con China.
[Fuente: Xinhua, La Habana, 03ene10]
This document has been published on 30Mar10 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes. |