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13may06
En San Paulo se producen unos 55 ataques simultáneos por parte del crimen organizado en contra de la policia.
Al menos 32 personas, entre ellas 25 agentes del orden, murieron entre la noche del viernes y la madrugada del sábado en Sao Paulo en unos 55 ataques simultáneos perpetrados por el crimen organizado, informaron fuentes oficiales.
La ofensiva criminal escalonada, la más sangrienta en la historia del estado de Sao Paulo, con 42 millones de habitantes, también ha desatado rebeliones en 22 presidios.
En una de ellas, la Policía Militar tomó el control de la cárcel y liberó sanos y salvos a los rehenes.
El estado de Sao Paulo concentra el 40% de los 140.000 reclusos que componen la población carcelaria de Brasil.
Un nuevo balance parcial de la ofensiva criminal desatada en las últimas horas señala que de los 32 muertos, once eran agentes de la Policía Militar, siete eran agentes de la Policía Civil, tres de la Guardia Civil Municipal, cuatro guardias penitenciarios, más dos ciudadanos y cinco supuestos criminales. [foto de la noticia]
Según la Secretaría de Seguridad Pública de Sao Paulo otros dos civiles sufrieron heridas durante los mismos ataques, junto con 16 sospechosos.
La ola de violencia desatada hacia las 20.00 horas (01.00 horas) del viernes y que se extendió durante más de seis horas, se concentró en comisarías, patrullas y guardias que se movilizaban a pie por distintos puntos de la ciudad.
De esos ataques, 28 fueron perpetrados contra objetivos de la Policía Militar, veinte contra la Policía Civil, cuatro a la Guardia Civil Metropolitana y tres a la Secretaría de Seguridad Pública. Motín en 22 cárceles
De forma simultánea a estos atentados, la alerta se encendió en veintidós cárceles, en las que presos amotinados podrían tener hasta un centenar de rehenes, según informaciones periodísticas.
El secretario de Seguridad Pública atribuyó los ataques a una represalia por la transferencia de 765 presos de presidios del interior del Estado a dos penitenciarías de máxima seguridad, una en Presidente Venceslau, municipio situado a 620 kilómetros al oeste de Sao Paulo, y la otra en la zona norte de la capital.
Entre los transferidos hay 16 reconocidos líderes del "Primeiro Comando da Capital" (PCC), una de las principales organizaciones criminales del estado de Sao Paulo.
El PCC es acusado por las autoridades de promover las múltiples rebeliones y motines registrados en las cárceles paulistas que, en lo que va del 2006, ya se elevan a 42 levantamientos.
El gobernador de Sao Paulo, Claudio Lembo, garantizó que el Estado "no se curvará" (no se doblegará) ante la violencia.
[Fuente: El Mundo, Madrid, Esp, 13may06]
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