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30nov17
Unos machacas fueron la llave para llegar hasta 331 kilos de heroína en Barcelona
Es el mayor alijo de heroína intervenido en muchos años: 331 kilos, casi todos hallados entre sacos de cemento en polvo en el puerto de Barcelona. Esa droga se habría distribuido en diez millones de dosis, con un valor de 120 millones de euros, que miles de toxicomános habrían comprado en «narcopisos» y «supermercados» de la droga. Las cantidades no tienen parangón con otras operaciones -de ahí que el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, se desplazara a Barcelona para dar cuenta del servicio y felicitar a la Policía-, pero tampoco las pesquisas se ajustan a una investigación convencional, según las fuentes consultadas por ABC.
Los agentes detectaron que se iba a producir una venta de heroína entre dos dominicanos y otros dos individuos, un ecuatoriano y un español de origen turco. La vigilancia de estos segundones condujo hasta la primera partida: 25 kilos de heroína en Badalona. Los cuatro, de entre 30 y 45 años, fueron detenidos. A partir de ahí se produjeron registros domiciliarios en los que la Policía de Barcelona encontró otros 43 kilos del mismo estupefaciente, tres armas cortas y munición.
Los detenidos eran quienes habían traído la droga y los que la habían recibido, no los dueños de la misma ni quienes habían sufragado la partida. No tardaron en poner sobre otras pistas a los investigadores, dado que ellos tenían la llave; esa llave llevó hasta una terminal del puerto de Barcelona. Allí se guardaban desde hacía más de una semana nueve contenedores de cemento, más de 18 toneladas distribuidas en sacos de 25 kilos. Era el camuflaje de las 989 bolsas a razón de 250 gramos cada una que encontraron los agentes.El peso total: 263 kilos de «brown sugar».
Con la colaboración del Servicio de Vigilancia Aduanera se dio con la carga y con la empresa pantalla encargada de la importación del cemento, que contaba con una nave para recibir los envíos. Allí se intervino documentación que se está analizando. Y más que se tendrá que analizar, puesto que no se ha llegado a la cabeza de la organización. De hecho, es la Guardia Civil quien tiene desde hace más de un año judicializada una investigación en la Audiencia Nacional sobre la red responsable de ese cargamento y de otros, según confirmaron a ABC fuentes del Cuerpo. Estas fuentes mostraron su extrañeza por cómo se han desarrollado las pesquisas, de las que la Policía no les informó. El malestar es evidente.
«Habíamos pedido una reunión urgente en el Citco (Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado), pero no se ha hecho». Según la Policía, esa reunión se iba a celebrar hoy, aunque se ha pospuesto a la próxima semana. Será ahí donde se decida quién se queda con la operación, quién sigue investigando y quién es capaz de acabar con la trama.
[Fuente: Por Cruz Morcillo y Pablo Muñoz, ABC, Madrid, 30nov17]
Corruption and Organized Crime
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