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31ago08
Daniel Scioli dice que no va a dejar que se cartelice la provincia
Daniel Scioli atraviesa días difíciles en su gestión como gobernador. Pasado el conflicto con el campo, que impactó en su imagen y en las cuentas de Buenos Aires, enfrenta ahora un paro que dejó sin clases a las escuelas bonaerenses, la inseguridad que no frena su ritmo agobiante, y, además, sobrevuela la provincia un actor inquietante: el narcotráfico internacional.
"No vamos a permitir, de ninguna manera, que la provincia de Buenos Aires se cartelice", enfatizó Scioli en una entrevista con La Nacion, en la que dijo estar embarcado en "un combate implacable" contra la droga por su íntima vinculación con el delito.
El gobernador ratificó que se investiga la relación entre el triple crimen de General Rodríguez y actividades de narcos del cartel mexicano de León. Además, consideró que con el desmantelamiento de un laboratorio de éxtasis en Ingeniero Maschwitz, en julio, su gobierno "pateó el hormiguero" y "desencadenó estas peleas y venganzas". Pero el delito no es la única ni la mayor preocupación del gobernador, que reconoció estar angustiado por el conflicto docente que la semana pasada dejó a más de 4 millones de chicos sin clases y que amenaza con profundizarse. Hasta consideró que esa huelga ("injusta e irracional", dijo) fue lo peor que le pasó desde que, hace casi nueve meses, asumió el gobierno.
Pero pese a las dificultades fiscales de la provincia, aclaró que enfrentará la situación sin quejarse y que no pedirá auxilio a la Casa Rosada.
-El triple crimen volvió a poner a la inseguridad al tope de la agenda, pero también la actividad en el país del narcotráfico internacional. ¿Cómo piensa actuar ante esto?
-Estamos dando una pelea de fondo contra la droga, a partir de la vinculación directa que hay entre el consumo de drogas y el delito. La policía tiene instrucciones de ser implacable en este tema. Y da resultados: nunca en tan pocos meses se secuestró tanta droga como en éstos. Vamos a fondo, como cuando se desbarató ese laboratorio de droga sintética con 200 mil dosis de éxtasis. A partir de allí, se pateó el hormiguero. Empezaron las peleas entre bandas, que terminaron en crímenes mafiosos de venganza. Esto fue así. Nosotros estamos combatiendo la droga en todas sus formas, desde el pequeño laboratorio de paco hasta las bandas de narcotraficantes, como ésta del cartel de León de Guanajato, porque no vamos a dejar, de ninguna manera, que se cartelice la provincia.
-Pareciera que eso ya ocurrió.
-Yo estoy trabajando con la policía, con la Justicia y con la participación de la ciudadanía para llevar adelante esta lucha con todos los riesgos que esto significa, incluso personales. ¡Riesgos personales!
-¿Teme represalias de los narcos?
-Yo digo, con todos los riesgos que representa. Es una lucha entre la vida y la muerte y yo defiendo la vida.
-¿Qué opina de la novedad sobre el funcionario de General Rodríguez que aparece ahora vinculado con narcos mexicanos?
-No tengo demasiados detalles. Lo que puedo decir es que voy a ir a fondo en esta guerra contra las drogas, sin importarme quién sea el responsable, si tiene cargo o no.
-¿Va a adaptar su política de seguridad para lograr ese objetivo?
-La policía ya está en las calles. Hemos sacado más personal a las calles, con instrucciones precisas. Ya lo hice años atrás en el Abasto, a pequeña escala. Cuando pudimos derrotar a la droga, el barrio cambia. Muchas veces nos preguntábamos por qué muchos chicos cometían delitos y la respuesta era que estaban drogados. Hay que atacar ese problema porque está en el centro del tema delictivo.
-¿Qué piensa entonces del proyecto de despenalización del consumo que alienta el Gobierno?
-Hay que ver el proyecto.
-Pero filosóficamente, tendrá una postura.
-Hay que ver qué queda. No me gusta comentar proyectos que no conozco.
-Una de las premisas de su gestión en seguridad es incrementar el patrullaje. ¿Tiene solución la escasez de policías?
-Cuando me postulé, sabía cual era la situación. No voy a venir ahora a decir: "Ah, la policía no me alcanza" o "el presupuesto no me alcanza".
-Pero usted sabe que no alcanzan los efectivos que están en la calle.
-Tengo que mejorar la situación con lo que tengo. Entonces busco sacar presos de comisarías para tener más policías en la calle, sacar de oficinas administrativas, contratar retirados para hacer guardias adicionales y ampliar la capacitación.
-Otro problema cíclico de la provincia es la crisis docente, ¿cómo va a enfrentar el conflicto actual?
-Hacemos un esfuerzo enorme por la educación. Somos la provincia que más ha aumentado los ingresos de los docentes en el año. Espero que los chicos no sean más rehenes de una pelea política. Necesitamos sensibilidad.
-¿Mañana se les va a hacer una nueva oferta a los gremios?
-No, no está previsto. A lo sumo, lo que habíamos propuesto pagar en dos veces lo haremos en una. No hago promesas que no voy a poder cumplir.
-¿Va a pedir auxilio nacional?
-No. Yo no soy amigo de colgarme del gobierno nacional o llorarle ante cada problema que tengo.
-La diferencia entre lo que piden los docentes y lo que ofrece el gobierno es de $ 1300 millones. Luego llegarán los planteos del resto de los estatales. ¿Puede afrontarlo?
-La provincia no se va a comprometer a algo que no puede cumplir. Lo que pido es que no haya más medidas de fuerza. Es irracional, es injusto.
-El argumento de los gremios es que aumentaron los precios; por eso piden un aumento del 20 por ciento. ¿Le parece exagerado?
-Lo que digo es que mejoramos la situación de los docentes en un 35 por ciento este año. ¿Qué gremio recibió tanto? Ni aquellos que hablan de manera desopilante sobre el aumento de precios llegan a ese número.
-En la base del reclamo está el problema de la inflación, ¿le preocupa el aumento de los precios?
-Nosotros lo que tenemos que hacer desde la provincia es aumentar la capacidad de producción. Aumentar la oferta se logra con inversión y cada con más confianza. Lo de la inflación es un proceso mundial relacionado con el aumento de la energía y de los alimentos.
-Cuando usted habla de buscar la confianza...
-Lo que dije es seguir mejorando la confianza; si no, parece que hubiera dicho que no hay confianza.
-Empresarios y analistas económicos señalan la falta de señales sobre el rumbo económico, sobre todo a partir de las dudas sobre el Indec. ¿Usted no incluye esto en el concepto de "mejorar la confianza"?
-Yo puedo hablar de Buenos Aires. Nosotros tenemos comprometidos inversiones por más de 5000 millones de dólares en lo que va de la gestión. La inversión va a llegar cada vez más. Sólo hay que alentarla.
-Muchos empresarios dicen que no hay aliento a la inversión.
-Cada uno tiene que hacer su trabajo de su lado del mostrador. Los empresarios tampoco pueden esperar todo del Estado. Ahora tenemos una nueva agenda, relacionada con las presiones del crecimiento y ya se irán encontrando las soluciones.
[Fuente: Por Pablo Morosi y Martín Rodríguez Yebra, La Nación, Bs As, Arg, 31ago08]
Informes sobre corrupción y crimen organizado
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