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11may14
Seguimientos y denuncias siguen moviendo caso de 'hacker' Sepúlveda
Desde el martes pasado, Andrés Sepúlveda permanece detenido en los calabozos del búnker de la Fiscalía.
Fiscales 'chuzados', casas de investigadores registradas ilegalmente por desconocidos, seguimientos a testigos y la versión sobre una supuesta infiltración en la campaña del candidato presidencial Óscar Iván Zuluaga pusieron en máxima tensión la investigación que sorprendió al país la semana pasada sobre la existencia de un posible plan para torpedear el proceso de paz.
Luego de que EL TIEMPO revelara el martes pasado un gigantesco operativo del CTI de la Fiscalía en el que fue descubierta una sala de interceptaciones de correos electrónicos, en la que fue capturado el hacker Andrés Sepúlveda, se desencadenó un escándalo que tocó el tema judicial y político, que incluso condujo a la renuncia de un importante directivo de la campaña uribista. (Lea también: Por decreto, reglamentan prácticas de inteligencia).
El más reciente episodio de esta novela se dio el sábado pasado, cuando la Fiscalía anunció una investigación por el hostigamiento que estaban recibiendo investigadores y testigos.
Este diario conoció que la casa de uno de los peritos del CTI, experto en sistemas y que analiza las evidencias del caso, fue violentada por desconocidos el viernes pasado. Fuentes del ente acusador señalaron que el funcionario llegó en la noche a su residencia, en el occidente de Bogotá, y la encontró revolcada y con claras muestras de que quienes habían irrumpido estaban buscando algo en particular porque no se llevaron nada.
"No hay evidencias de robo y lo cierto es que en el sitio no había información del proceso. Se están verificando los dos computadores del investigador para descubrir si se accedió a ellos", señalaron fuentes del ente acusador. Agregaron que se están verificando las cámaras de seguridad de la zona y se tomaron muestras de huellas digitales en toda la residencia.
Al día siguiente, la fiscal delegada ante el CTI que lleva la investigación contra Sepúlveda descubrió que su cuenta personal de correo había sido jaqueada. (Lea también: Los archivos del 'hacker' Sepúlveda acusado de espiar proceso de paz).
Al mismo tiempo, uno de los testigos denunció que un vehículo en el que viajaban dos personas lo estuvo siguiendo durante varias horas en sus desplazamientos por Bogotá.
Esos hechos obligaron a que el sábado por la tarde se reuniera la cúpula del organismo investigador en la casa del fiscal Eduardo Montealegre y se tomaran decisiones urgentes para blindar las evidencias y proteger a los testigos y a los investigadores.
Horas después de que la Fiscalía revelara estos hechos, David Zuluaga, hijo del candidato y representante legal de esa campaña, dijo que habían sido infiltrados y que conocían la existencia de un video grabado clandestinamente de la "única visita" que el candidato había hecho a la oficina en la que trabajaba el equipo de Sepúlveda. También admitió la existencia de dos correos electrónicos del hacker, uno para él y Luis Alfonso Hoyos, y el otro solo para él. "El contenido de ambos correos, ninguno de los cuales obtuvo respuesta mía, se pondrá en conocimiento de las autoridades", agregó.
El martes pasado, horas después de haberse conocido la noticia, el candidato presidencial admitió la relación contractual de su campaña con Sepúlveda. Luego pasó a la ofensiva y acusó al gobierno del presidente Santos de estar detrás del escándalo.
Pero el miércoles el jefe espiritual de la campaña, Luis Alfonso Hoyos, de las entrañas del expresidente Uribe y exjefe político de Zuluaga, tuvo que renunciar. El canal de noticias RCN lo mostró llevando a Sepúlveda ante el director de ese medio, Rodrigo Pardo, hace pocas semanas.
Lo visitó Lina Luna
Ese mismo día, Zuluaga dijo: "No estoy enterado en detalle de todo lo que pasa alrededor de una campaña; yo prácticamente no estoy involucrado con nada de ese tema". El jueves, el candidato le dijo a la FM que nunca estuvo en el sitio allanado por la Fiscalía. Pero el sábado ya admitió que sí había estado en la oficina allanada. Pero aclaró que estuvo "para saludar a las personas que hacían un trabajo de apoyo social".
El hacker Sepúlveda sigue preso en el búnker de la Fiscalía y está buscando beneficios judiciales a cambio de delatar con quién y para quién trabajaba. La semana pasada lo visitó en el lugar de detención su esposa, Lina Luna, quien aparece mencionada en la investigación.
Entre tanto, el fiscal Montealegre anunció que el primero que será llamado a declarar en el proceso será Luis Alfonso Hoyos.
De todas maneras, de acuerdo con los investigadores del caso, cada vez hay más evidencias que muestras los supuestos nexos de Sepúlveda con integrantes de la Fuerza Pública y algunos particulares con intereses en torpedear el proceso de paz.
Por ahora, este escándalo deja más preguntas que respuestas y ha planteado serios interrogantes, como quién está siguiendo a la Fiscalía y hasta dónde fueron vulnerados secretos de la negociación de paz en La Habana, por lo que urge que la investigación avance.
A dos semanas de que se realice la primera vuelta presidencial también ha polarizado el ambiente político y todavía no se ha determinado qué tanto afectará la decisión del voto de los colombianos.
Sepúlveda fue vetado en la Sijín
El año pasado, en tres ocasiones, el hacker Andrés Sepúlveda intentó llegar a inteligencia de la Policía con información sobre supuestas actividades de las Farc.
Fuentes de la Fuerza Pública señalaron que se presentó a la Sijín de Bogotá diciendo que había sorprendido a su empleada del servicio con información de las Farc y luego afirmó tener contacto con una mujer que estaba en un hospital de la ciudad y que tendría datos claves sobre actividades de la guerrilla en el Caquetá.
Por ser un tema relacionado con objetivos de inteligencia de la Policía se pasó el caso a uniformados de esa dirección, que luego de analizar la información consideraron que era de oídas y la descartaron al considerar que había más un interés económico de la fuente. Sepúlveda siguió insistiendo y contactó a un coronel y luego a un sargento asegurando que tenía información sobre actividades terroristas. Según las fuentes consultadas, cuando el hacker dijo que tenía un software para cruzar las bases de datos de la Policía, y así hacer más efectivas las labores de inteligencia, los uniformados entendieron sus intenciones y en la minuta de la sede policial se puso una anotación para evitar su ingreso.
Lo que dijo la campaña
Según un comunicado de Óscar Iván Zuluaga, Andrés Sepúlveda hacía parte del equipo encargado de apoyar la campaña en redes sociales y seguridad informática. (Lea también: Campaña de Óscar Iván Zuluaga dice que fue infiltrada).
De acuerdo con el candidato, Sepúlveda estaba contratado desde enero pasado, junto con su grupo familiar, para que le prestara ese apoyo a la campaña, tiempo durante el cual desarrolló "las tareas convenidas a plena satisfacción de la campaña y sin ninguna queja de parte nuestra". Parte de su trabajo formal era defender por redes sociales a su candidato.
[Fuente: El Tiempo, Bogotá, 11may14]
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