EQUIPO NIZKOR |
|
15ago12
La Fiscalía explicó las razones por las que desvirtuó las pruebas contra el exdiputado
Sobre las declaraciones de Edver Fajardo, exintegrante del bloque móvil Arturo Ruiz de las Farc, la Fiscalía consideró que "han surgido eventos procesales que indudablemente colocan en tela de juicio la certeza de sus afirmaciones y agudizan más la reservas que ya se advertían.
El testigo dijo que en la casa del exdiputado en Pradera (Valle) su esposa Patricia Nieto atendió a una guerrillera herida. Sin embargo, con testimonios la Fiscalía descubrió que para esa época la familia de López ya no vivía en esa casa y estaba arrendada. Allí había un consultorio odontológico.
"Con ese cuestionamiento comienza a flaquear su solidez como consecuencia de las falsedades advertidas en sus manifestaciones", señala la Fiscalía.
Sobre la llamada que habría hecho el exdiputado al expresidente Andrés Pastrana y el general Jaime Canal el día del secuestro, ese hecho fue desmentido por ellos mismos y el guerrillero Gustavo Arbeláez Cardona, condenado por el secuestro, sostiene que para la época los guerrilleros no tenían teléfono satelital.
Igualmente, el guerrillero dijo que el testigo "es una persona en permanente búsqueda de protagonismo que sorpresivamente ha hecho aparición en investigaciones judiciales de envergadura suministrando información que la mayoría de las veces no es cierta".
En tanto, Julio César Salazar, supuesto guerrillero del Eln, dijo que Sigifredo López primero le ofreció el secuestro al Eln y que lo vio en campamentos de ese grupo. La Fiscalía no logró comprobar que Salazar efectivamente pertenecía a ese grupo y su versión contradice la del otro guerrillero Edver Fajardo quien dice que la idea del plan fue de las Farc y no del Eln.
Un testigo identificado que estuvo secuestrado por el Eln explicó a los investigadores que Salazar era en realidad un delincuente común que vendía a los secuestrados a la guerrilla.
"Llama la atención que la información de una acción de semejante envergadura se hubiera transferido del Eln a las Farc de manera tan poco confidencial y tan poco discreta" dice la Fiscalía.
Agrega que la credibilidad del testigo "se encuentra disminuida".
María Eugenia Mina, guerrillera de las Farc, dijo que presenció el trato favorable que tenía el exdiputado en cautiverio y las supuestas visitas de su esposa a los campamentos.
La guerrillera acusó a Meter Arango Bermúdez de ser un comandante de las Farc y por ello fue capturado y acusado de homicidio y rebelión. En el proceso se demostró que el otro no hacía parte de las Farc y el caso fue precluido.
Igualmente, un investigador del CTI de Santander dijo que la guerrillera entregó información sobre la existencia de la ubicación de caletas de armas y laboratorios de cocaína que luego de ser verificados no fueron encontrados.
Su testimonio era tan dudoso que en ese momento los investigadores alcanzaron a temer que se trataba de una emboscada.
La guerrillera acusó a un policía de Timba (Cauca) de abuso sexual y en ese caso no se encontraron evidencias para seguir investigando y el caso fue archivado.
La mujer se desmovilizó tres veces en julio de 2006, noviembre de 2007 y diciembre de ese mismo año. Esos hechos para la Fiscalía ratificaban que la guerrillera intentaba "embaucar y enredar a las autoridades con el pretexto de prestarles colaboración".
Sobre las supuestas salidas del exdiputado de los campamentos, la Fiscalía considera las afirmaciones "absurdas y descabelladas" además poco creíbles por "las dificultades geográficas y militares" de la zona.
Por esas razones la Fiscalía decidió no dar crédito a los testigos y dejar en libertad al exdiputado.
[Fuente: El Tiempo, Bogotá, 15ago12]
This document has been published on 23Aug12 by the Equipo Nizkor and Derechos Human Rights. In accordance with Title 17 U.S.C. Section 107, this material is distributed without profit to those who have expressed a prior interest in receiving the included information for research and educational purposes. |