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29abr08


En "rifi rafe" entre Álvaro Uribe y Ramiro Bejarano terminó diligencia judicial


La diligencia judicial en la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara de Representantes en la cual el presidente de la República, Álvaro Uribe, ratificó en su denuncia por injuria en contra del magistrado de la Corte Suprema de Justicia César Julio Valencia Copete, culminó con una dura confrontación verbal entre el abogado Ramiro Bejarano y el mprimer mandatrio en donde se dijeron frases de fuerte calibre , sin entrar en vulgaridad pero si en golpes bajos.

Eran exactamente la una y cinco minutos de la tarde cuando se dio por finalizada el encuentro judicial por parte del parlamentario investigador Carlos Ramiro Chavarro y se ordenó imprimir las copias del acta para darle un juego a cada una de las partes - acusador y acusado-.

El presidente Uribe, ante sde despedirse, dijo "esto no es un proceso jurídico, este es un proceso político, el magistrado Valencia Copete me manda un periodista y jefe de la oposición..Nostálgico de las Farcy amigo del terrorismo".

Bejarano le respondió de inmediato: "Lo que digo en las columnas lo sustento".

 El congresista Ramiro Chavarro al observar las frases cruzadas invitó al presidente a que se trasladara al salón contiguo en donde queda la Presidencia de la Comisión y y le advierte "yo me quedo aquí" hasta firmar las copias.

Uribe insiste y le dice a Bejarano que entregue las pruebas: "pruébame pues, tu no traes ninguna prueba". Ya el presidente en la diligencia había entregado pruebas a través de documentos y testimonios recopilados en los medios de comunicación.

El presidente dijo que esta dispuesto a conciliar, pero si se reconocía que no llamó al amgistrado para preguntar por su primo Mario Uribe. "Yo llame para hablar del caso de Tasmania y lo que estaba pasando con el magistrado Iván Velásquez, yo no llame para favorecer a Mario Uribe, aquí la institución está en juego".

Bejarano le respondió que "eso no es cierto" y el jefe de Estado no se calló: "o no soy la institución, yo represento a la Presidencia de la República".

 Se conocio por las partes que emisarios del presidente y el magistrado han tratado de lograr una conciliación pero hasta el momento nada se ha logrado.

El presidente que hablaba duro y moviéndose por toda la sala decía una y otra vez que no hay pruebas de que haya intervenido a favor de su primo Mario Uribe.

El presidente le preguntaba a Bejarano que el que había hecho en el DAS (del que fue director) y le decía que tiene claro su cometido en el proceso. Bejarano que también se mostraba ansioso hablaba de otros temas que hacen relación a la coyuntura nacional.

 El abogado defensor también utilizó la estrategia de salirse del tema que los reunía en la ampliación de denuncia, por lo que el congresista investigador Carlos Ramiro Chavarro aceptó la petición del abogado del presidente Álvaro Uribe, Jaime Lombana, quien objetó los cometarios subjetivos y en tres ocasiones no se aceptaron en la diligencia los cometarios de Bejarano. Uribe volvió a decirle, "si usted tiene cómo demostrarlo, demuéstrelo".

Bejarano ripostó: "yo demuestro lo que yo quiera. Finalmente usted no es mi amigo". El presidente respondió: " usted tampoco es mi amigo".

Después de 15 minutos de tensión llegaron las copias de la diligencia, el presidente uribe firmó y se despidió: " hasta luego doctor Bejarano" y Bejarano respondió "hasta luego señor presidente de la República".

Primera Página estableció que entre el seis y el siete de mayo serán citados el procurador general de la Nación, Edgardo Maya Villazón y el fiscal general de la Nación, Mario Iguarán para que expliquen que pasó en la reunión del 18 de enero en donde el presidente de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia Alfredo Gómez y los magistrados de la Corte Suprema hablaron de la llamada del presidente Álvaro Uribe para tratar la situación de "Tasmania".

La controversia entre el presidente uribe y el magistrado Valencia se inició con la llamada de Uribe el 20 de septiembre y la publicación de la información en el semanario El Espectador el 13 enero.

El presidente Álvaro Uribe llegó a las nueve de la mañana en punto a la Comisión de Investigación y Acusación de la Cámara ubicada en el quinto piso del edificio nuevo del Congreso.

El congresista Carlos Emiro Chavarro le pregunto al jefe de Estado si se ratificaba y ampliaba la denuncia en contra del magistrado de la Corte Suprema, César Julio Valencia Copete, y Uribe comenzó a presentar una disertación de varios minutos defendiéndose y explicando que su llamada no tenía la intención de favorecer a su primo Mario Uribe.

Bejarano le dijo al presidente y a los asistentes que no había sido reconocida la parte civil del apoderado de Uribe, Jaime Lombana, y recordó que el expediente no se lo prestaron el viernes porque estaban fumigando

Bejarano acusó al presidente de haber dicho que la Corte era golpista y que prueba de ello era lo que dijo en el programa "La Noche" de Claudia Gurisatti que se emite por RCN y dejó la prueba en el expediente.

El presidente dijo que en dicha entrevista jamás mencionó la Corte Suprema e increpó a Bejarano de estar desviando lo que realmente se habló en el medio de comunicación.

Uribe acusó al magistrado Valencia de usar a sus contradictores políticos como sus defensores y se preguntó si seria bueno un debate en otro escenario sobre la función de Bejarano al frente del DAS con respecto al tratamiento que le dio a los paramilitares y los guerrilleros, no sin dejar de recalcar la política del Gobierno en torno a la lucha en contra de estos grupos ilegales.

Bejarano le dijo a Uribe que a palabras necias oídos sordos y dijo al mandatario que se acordara de su paso por la Gobernación de Antioquia y el comportamiento que tuvo, en ese momento, el hoy pesidente con los paramilitares y los guerrilleros.

Este fue el momento más álgido de la diligencia, Uribe se puso de pie y le dijo que eso era un ataque personal. Al representante Chavarro le correspondió llamar al orden y pidió respeto por la Comisión y la diligencia que se adelantaba.

Uribe insistió que este escándalo político por parte del magistrado fue un atentado a la majestad no de Álvaro Uribe sino del presidente de la República y Bejarano no ha entregado pruebas indicativas que lo vinculen formalmente a la acusación que hizo Valencia con respecto a la llamada y consideró que este caso esta sustentado en leguleyadas.

[Fuente: Agencia Primera Página, Bogota, 29abr08]

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