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19ago12
Las piezas que faltan en el caso Garzón
El narcoparamilitar Diego Murillo Bejarano, 'Berna', lleva varios meses tratando de ubicar una caleta en la que el jefe de las autodefensas Carlos Castaño guardaba documentos, CD y memorias USB con información clave. (Lea también: Así planearon 'Berna' y las Auc el crimen de Jaime Garzón).
'Berna' cree que allí, en una maleta negra, está la carpeta que agentes de inteligencia del Ejército y el DAS le habrían armado al periodista y humorista Jaime Garzón y le hicieron llegar a Castaño para que ordenara su ejecución, el 13 de agosto de 1999.
El dosier 'oficial' sería una de las pruebas de la supuesta participación en el homicidio de agentes del Estado. También, de la complicidad del exasesor del Ministerio de Defensa José Miguel Narváez, quien habría entregado la carpeta con los seguimientos hechos al humorista.
Hasta ahora, la única condena por este caso -que completó 13 años de impunidad- pesa contra Castaño, asesinado un mes después de ser sentenciado a 38 años de cárcel como el autor intelectual. Además, 'Berna' será inculpado el próximo 13 de septiembre, a pesar de que asegura que él no participó en el asesinato.
Narváez también insiste en su plena inocencia, que deberá ser demostrada en el juicio que se le sigue por instigar a Castaño para que matara a Garzón.
En su contra rezan las versiones de los 'exparas' Salvatore Mancuso, Freddy Rendón (el 'Alemán'), 'Berna' y 'Jorge 40'.
Pero aún hay muchos vacíos en el expediente. La Fiscalía no sabe qué oficiales habrían participado en la planeación del asesinato, quiénes desviaron el caso y a quiénes protegían. De hecho, aún no hay un móvil del crimen.
EL TIEMPO investigó y estableció las cinco piezas claves que faltan por encajar y halló pistas inéditas dentro del caso.
Jorge Eliécer Plazas, coronel (r.) fugitivo señalado por 'Berna' de participar en el crimen (y en la masacre de Mapiripán) es hoy el elemento más importante, al igual que quienes lo ayudaron a huir del país, junto con su familia. También aparece el expolicía Byron Ordóñez, 'Careguayo', mencionado en el proceso que EE. UU. le sigue al general (r.) Mauricio Santoyo.
Estas son las claves que ayudarían a aclarar el crimen
Oficiales, ¿cómplices de 'la Terraza'?
'Berna' le dijo a la Fiscalía que inteligencia militar estuvo detrás del crimen. Además, que uno de los oficiales comprometidos es el coronel (r.) Jorge Eliécer Plazas, entonces jefe de inteligencia de la Brigada XIII y hombre de confianza del general (r.) Rito Alejo del Río. El oficial Plazas, que también aparece involucrado en la masacre de Mapiripán (1996), habría ordenado los seguimientos a Garzón para que la banda 'la Terraza' conociera sus rutas y ejecutara el crimen. Los datos habrían sido llevados a Castaño por José Miguel Narváez. Además, 'Berna' dice que hombres de Plazas ayudaron a los sicarios a huir. La Fiscalía anunció esta semana que ya vinculó al expediente a Plazas, quien se fugó hace nueve años de la Escuela de Artillería en Bogotá tras ser condenado a 40 y 28 años por la muerte del industrial israelí Benjamín Khoudari y por el plagio del comerciante Wilson Martínez (1998). Y aunque dicen que 'paras' del Llano lo protegen, gente cercana al caso le aseguró a EL TIEMPO que salió del país ayudado por oficiales y que cambió su fisonomía. En este capítulo, los Garzón, representados por el abogado Alirio Uribe, piden que se establezca si el periodista buscó o no a tres generales -molestos por su labor para reiniciar diálogos de paz con el Eln- para aclararles su rol. La propia embajada de EE. UU. registró este hechos días antes del crimen.
¿El DAS desvió el caso?
En marzo del 2004, un juez especializado concluyó que los testigos que señalaban a Juan Pablo Ortiz, 'Bochas', como el autor material del crimen de Garzón eran falsos. Pero nadie los ha investigado. Entre ellos está Wilson Llanos, amigo de 'Bochas'. Además, Maribel Pérez y María Amparo Arroyave, quienes identificaron al supuesto asesino. Esta última viajó a México cuando su versión empezó a ser cuestionada. Tampoco se ha investigado a los detectives del DAS Alfonso Guarnizo, Fernando Parga y Luis Nemesio Rueda, quienes ubicaron a esos testigos y aportaron la información que implicaba a 'Bochas' y a Antonio Sierra (el supuesto conductor de la moto usada en el crimen).
Testigo común con Santoyo
Hasta ahora, dentro del expediente se asegura que 'Berna' fue quien coordinó el contacto para que la banda 'la Terraza' asesinara a Garzón. Si es cierto, la orden tuvo que haber pasado por el expolicía Byron Ernesto Ordóñez Portilla, 'Careguayo'. EL TIEMPO estableció que cuando Ordóñez era mayor activo de las Fuerzas Especiales de la Policía también actuaba como delegado de 'Berna' ante 'la Terraza'. Según testimonios de 'paras', le transmitía a la banda los encargos delictivos de 'Berna'. Se trata del mismo oficial (r.) que ha testificado en EE. UU. en contra del general (r.) de la Policía Mauricio Santoyo y de otros miembros activos y retirados de esa institución acusados de aliarse con criminales para exportar coca y cometer otros delitos.
Además, Ordóñez era amigo del oficial de la Policía Edward García, Orión', quien también terminó enrolado en las filas del paramilitarismo.
Un sobreviviente
'Berna' también rastrea a un exjefe de la 'Terraza', la banda que asesinó a Garzón. Así se lo aseguró a EL TIEMPO un allegado al 'expara'. Según 'Berna', el hombre es el único sobreviviente de la banda, que Castaño aniquiló ante la negativa de entregarle el arma con la que mataron a Garzón y la intención de manejar rutas del narcotráfico. "Castaño mató al 'Negro Elkin', a Mosquera, a 'Tatuado' y a 'Chocho'. Pero hay un líder vivo que puede hablar del crimen y dar fe de que, para la época, 'Berna' no era el jefe de la banda' ", dice su allegado. Pero el 'expara' no ha mencionado en sus versiones ni al sobreviviente ni la búsqueda del dosier.
Los tres móviles del asesinato
La investigación se inclina por la hipótesis de que el crimen se relaciona con el malestar de estamentos oficiales por los contactos de Garzón con las Farc para la liberación de secuestrados. De hecho, un juez del caso dijo que su muerte no tenía nexos con su oficio. También se le atribuye a gestiones que habría hecho para reiniciar diálogos de paz con el Eln e incluso a las ácidas críticas que hacía en sus programas.
[Fuente: Por Unidad Investigativa, El Tiempo, Bogotá, 19ago12]
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