|
Mario Barrios:
Música para una muerte accidentalpor Jorge Soza Egaña(*)
Nombre
Mario Barrios GallardoLugar y fecha de nacimiento
Santiago, 7 de febrero de 1948Especialidad
Editor, periodista e impresorLugar y fecha de muerte
Santiago, 24 de julio de 1984Actividades
Trabajó en Puro Chile y El Popular (Arica). Editor clandestino de El Siglo, Unidad Antifascista y otras publicaciones del PC.
Mario Barrios Gallardo fue un destacado promotor de la prensa del PC que murió a los 36 años en un oscuro accidente de tránsito, en la madrugada de "San Juan" de 1984, en la intersección de Cinco de Abril y Toro Mazóte. El vehículo que lo chocó se desplazaba con las luces apagadas, el cuerpo permaneció bajo la lluvia pero su hermano Guillermo comprobó que sus ropas estaban cubiertas de barro, el certificado de defunción mencionó como causa del deceso un «TEC cerrado» y la prensa no registró el supuesto accidente.
"Según mí tío Guillermo Barrios, no fue un simple accidente, pero nunca se realizó una investigación a fondo del extraño choque", dijo su hijo Mario Barrios Rivera. "El cerco se cierra cada día más" comentáron los hermanos Barrios, porque en esos días fueron detenidas varias personas vinculadas a las publicaciones clandestinas del PC, de acuerdo a los informes recogidos por el hijo, que entonces tenía 6 años.
Esa noche, Mario Barrios Gallardo se encontró con Lautaro Parra, en la Peña de Nano Parra, para acordar la publicación de un libro sobre folklore. Pero tuvo que interrumpir la velada, a solicitud de un amigo, para trasladar a su casa a una mujer que manifestó sentir un malestar. La dama, requerida después por el hermano Guillermo, negó rotundamente conocer a la víctima y que la hubiese llevado en su automóvil. El músico Patricio Solovera, primo de Mario Barrios padre, también cree que fue asesinado.
Trayectoria profesional
Mario Barrios estuvo siempre ligado a las actividades periodísticas del PC. Fue dirigente estudiantil secundario y realizó estudios de periodismo en la entonces Unión Soviética. En 1970 integró el primer equipo del diario Puro Chile, cuyo director fue José Gómez López; en 1972 se desempeñó en las estructuras de prensa y propaganda de su partido; y en 1973 organizó en Arica la edición de El Popular, que tuvo corta vida. A su regreso a Santiago fue detenido por la DINA y trasladado al regimiento de Ingenieros de Tejas Verdes, cuyo jefe era el coronel Manuel Contreras.
Cuando recuperó la libertad trabajó en publicaciones sindicales de las federaciones de la Construcción y Campesina Ranquíl, hasta que se trasladó a la Argentina, en 1976, para escribir el guión de una película francesa sobre el gobierno de Salvador Allende. Sin embargo, el trabajo cinematográfico no prosperó por diferencias políticas de enfoque con la producción del film. De regreso en Chile editó la obra Los cien años de la minería en Chile y se incorporó a la revista jurídica Míe va Gaceta. Posteriormente, se hizo cargo de la edición de las publicaciones clandestinas del PC, entre otras El Siglo y Unidad Antifascista.
Sinfonía de la eternidad
Mario Barrios Rivera, ahora de 18 años, estudia en la facultad de Artes de la Universidad de Chile. Ya escribió la música de La víspera del degüello, de Jorge Díaz y de otras obras teatrales. También compuso Sinfonía de la eternidad, en homenaje a su padre. «Conservo muy vivos recuerdos de mí padre, mi amigo y compañero; me sacaba a correr por el parque con mi perrito Lucky, me llevaba a su imprenta, lo acompañaba a entregar los afiches al festival del folklore de San Bernardo y, en general, me aguantaba todo. Seguramente tenía fallas, pero en mis recuerdos lo visualizo como un modelo de hombre», relató el joven músico.
Mario Barrios hijo tiene dos hermanos, Abril, de 10 años, y Lenz Puéller Rivera, nacido en la nueva pareja que formó su madre, la periodista Inés Rivera. «Si bien hoy más maduro me cuestiono la muerte de mi padre y al pensar en la posibilidad de un asesinato siento daño y rabia, no permito que esa sensación me frustre; todo lo contrario», dijo. «Trato de valorar aún más lo que tengo, una familia, un hogar con todo lo que ello implica; tengo mis hermanos, mis viejos y veo el futuro con optimismo. Me siento seguro de lo que soy capaz y tengo unas tremendas ganas de alcanzar la meta más alta que me he propuesto: ser compositor».
Jorge Soza Egaña es periodista y escritor.